Cuando la ola de frío aún no se había apoderado de Barcelona y disfrutábamos de un invierno tropical de los molones, decidimos llevar a mini L al acuarium y luego comer ls 4 por la Barceloneta.
El restaurante elegido fue El Guindilla ( Plaça del Poeta Boscà, 2 – En el mercado de la Barceloneta) Es cómodo, grande (vamos con necesidad de una trona y espacio para un cochecito…)y con tronas a disposición. Hacía un día muy bueno así que decidimos comer en la terraza.
Para comer, pedimos varias tapas para partirnos y una hamburguesa de pollo para mini L (que se acabo comiendo Borja… porque el devoró todas las tapas)
- Bravas
- finguers de pollo
- huevos estrellados
- hummus de berenjena
Nos gustó mucho, todo de muy buena calidad (genial que estén situados en un mercado para que el producto sea fresco fresco…). Si vais con peques, los finguers de pollo con un poco de patatas de los huevos estrellados son éxito seguro.
Se me paso hacer foto a la cuenta, nos costó 18 euros por persona contando con mini L. Bien.
Es muy cómodo ir con enanos, la terraza da a una plaza muy grande que tiene parque así que los niños pueden ir a jugar mientras haces sobremesa. ¡repetiremos!